Zamioculca Zamiifolia: la planta más resistente
Hola a todos y a todas, amigos del reino vegetal. Hoy quiero hablaros de una de las plantas más resistentes y conocidas para tener en casa: la Zamioculca Zamifoliia.
Acostumbrados a verlas en arriates, portales y en zonas de paso comunes, la Zamioculca Zamifoliia es una planta que requiere muy pocos cuidados y es extremadamente agradecida.
Si no tienes una, te recomiendo la consigas porque además de ser super fácil, es una planta preciosa: tonos verdes, tallos gruesos y un brillo espectacular.
¿Quieres aprender cómo cuidarla? Te dejo un vídeo resumen donde te explico sus cuidados, si quieres conocerla mejor ¡sigue leyendo!
Tipo de planta y origen
La Zamioculca Zamiifolia, es una planta originaria de África, de la familia de las Aráceas.
Sus hojas, que son muy carnosas, son de color verde intenso y ovaladas. Cuando sus hojas salen son de color verde muy claro y con el tiempo van cogiendo color verde más intenso.
Sus tallos son también muy gruesos, de color verde blanquecino y a menudo con manchas marrones oscuras. El peciolo de la hoja es corto y marcado a lo largo de la hoja.
Las raíces de la Zamioculca Zamifoliia son muy curiosas: mezcla raíces convencionales con bulbos muy similares a las patatas. Las raíces y los tallos le sirven como reserva de agua, por lo que tenemos que llevar cuidado con el exceso de riegos.
Sabías que... las Zamioculcas Zamifoliia prefieren estar en macetas pequeñas, con las raíces bien apretadas, pero cuidado, sus raíces son tan gruesas y fuertes que a menudo acaban rompiendo su contenedor. Cámbiala a una maceta un tamaño o dos mayor, no la pases a macetas demasiado grandes porque se resentirá. Aprende todo sobre los trasplantes en este post de aquí.
Iluminación y ubicación
La Zamioculca Zamifoliia es una planta considerada como planta de interior, aunque a menudo la vemos en exteriores. Es así porque el sol amarilleará sus hojas y las quemará, aunque podemos tenerla en exterior sin problema evitando que le den los rayos solares directamente.
Para mantener la Zamioculca Zamifoliia con los colores verdes vivos y un crecimiento constante, es importante ubicarla en un lugar donde reciba mucha luz indirecta como por ejemplo cerca de una ventana, en un patio interior o en una terraza techada.
Son plantas muy fuertes y que no se resienten fácilmente con las temperaturas, ya que aguantan tanto el frío como el calor extremo.
Sabías que… a pesar de ser plantas que crezcan más rápidamente con mucha luz, son utilizadas en lugares poco iluminados. Esto se debe a que no se resienten con una iluminación más baja. Si tienes un rincón poco iluminado y quieres añadir algo de verde, es tu planta ideal.
Riego y humedad
A pesar de no ser una suculenta, los riegos de la Zamioculca Zamiifolia deben ser muy similares.
Al tener las raíces bulbosas, la Zamioculca Zamiifolia es capaz de almacenar muchísima agua en su interior para aguantar épocas de sequía.
Es muy habitual que las Zamioculcas Zamiifolia mueran por exceso de riego, por lo que os recomiendo que dejéis que el sustrato se seque totalmente entre riego y riego para evitar pudriciones.
En cuanto a la humedad, al igual que con el riego no es exigente con ella. No es recomendable aportarle humedad extra ya que se resentirá con el exceso de ella, por lo que os recomiendo que no la pulvericéis ni la pongáis cerca de otras plantas tropicales que necesiten humedad extra ambiental.
Si tienes plantas que necesiten humedad ambiental, puedes leer este artículo donde te explico cómo aportar humedad extra al resto de tus plantas.
Si quieres limpiar las hojas de tu Zamioculca Zamiifolia, recuerda que simplemente necesitas un trapo húmedo en agua y paciencia. Recuerda limpiar tanto el haz, el envés como los tallos de tus hojas. Verás cómo brillan sus hojas y lo bonitas que se ven. Conoce cómo limpiar las hojas de las diferentes plantas en este artículo.
Sustrato y maceta
Al ser una planta que se resiente fácilmente con el exceso de riegos, necesitaremos un sustrato suelto y drenante. Para ello, es recomendable que creéis vosotros mismos la mezcla de sustrato.
Yo en la Zamioculca Zamiifolia uso la siguiente mezcla, aunque recordad que vosotros podéis sustituir ingredientes por otros que uséis habitualmente o tengáis en el momento del trasplante y que hagan la misma función.
Aquí os dejo la mezcla que suelo utilizar:
- Dos partes de sustrato universal
- Una parte de hummus de lombriz
- Una parte de perlita
- Una parte de corteza de pino
Si queréis conocer más mezclas de sustrato que suelo utilizar, podéis leer este artículo donde os explico diferentes mezclas.
En cuanto a la maceta, como sabéis hay diferentes tipos, formas, tamaños y características.
Las más conocidas son las de barro o terracota y las de plástico. Aquí os dejo las características de cada una de ellas para que elijáis.
Según dónde viváis y la ubicación que elijáis será recomendable usar una u otra maceta, por lo que os dejo también el video donde explico las diferentes macetas y características para que seleccionéis la maceta perfecta para vuestra planta:
Multiplicación, propagación y poda
Afortunadamente, la Zamioculca Zamiifolia, además de no requerir muchos cuidados, es una planta que no necesitará que la podemos para continuar con su crecimiento.
Si te apetece multiplicar tu Zamioculca, la semana que viene tendrás un nuevo post donde te enseño cómo hacerlo ¡no olvides visitar el blog!
Plagas más comunes
La plaga más común en la Zamioculca Zamiifolia es la cochinilla lapa.
La cochinilla lapa, de nombre científico Dactylopius Coccus es un insecto marrón de caparazón duro que se pega en los tallos y hojas y se alimenta de la savia de las plantas.
A pesar de no ser una plaga difícil de eliminar hay que hacerlo rápidamente porque es muy dañina para las plantas. Yo suelo hacerlo manualmente:
- Impregno en alcohol de farmacia un bastoncillo para las orejas.
- Hoja por hoja y tallo por tallo, voy eliminando una a una las cochinillas que veo. Verás que de donde la quites se quedará una marca. Esa marca se quedará para siempre, ya que será una herida que con el tiempo será una cicatriz.
- Una vez he acabado con toda la cochinilla, hago una mezcla de Aceite de Neem y agua, normalmente un 20% de Neem en un 80% de agua.
- Pulverizo toda la planta y dejo que el mejunje haga efecto durante una hora aproximadamente.
- Tras ello, limpio todas y cada una de las hojas con un trapo húmedo en agua, y si es necesario, pongo la planta debajo de la ducha para retirar toda la mezcla de Neem.
- Finalmente, limpio y seco las hojas para evitar la proliferación de futuras plagas como hongos.
Actualmente en el mercado hay diferentes tipos de Zamioculcas, aunque todas con la misma forma en diferentes colores: las hay variegadas e incluso de color negro. ¿Tú tienes alguna? ¿Cómo la cuidas? ¡Compártelo en comentarios!
Como siempre, recuerda que puedes visitar mi canal de YouTube y unirte a mi comunidad de #plantlovers. También estoy activa en Instagram, Facebook y TikTok.
Más posts que seguro que te interesan
- 8 plantas de interior con colores espectaculares
- ¿Por qué se secan las puntas de mis plantas?
- Adiós a las moscas del sustrato (fácil y económico)
- ¿Conoces la Cola de Caballo? Consigue tu propio fungicida ecológico y casero
- ¿Cómo, cuándo y por qué debo trasplantar mis plantas?
- 4 formas de regar tus plantas
- Tips para saber cuándo regar (y no pasarte en el intento)